«Nos proponemos brindar un servicio excepcional»

La directora de Pedro Macció y cía comparte el camino recorrido por la empresa familiar, fundada hace casi seis décadas por su abuelo; hoy Pedro Macció y Cía es referente en el mundo del agro gracias a su compromiso por brindarle a los clientes productos innovadores, junto al mejor servicio.

Por Luis Cabrera

Fundada en 1967 por Pedro Macció y Miguel Lotito, Pedro Macció y Cía, parte del Grupo Macció, es hoy una de las empresas uruguayas de referencia en el agro, un emprendimiento familiar que se ganó la confianza de los productores locales por su trabajo responsable, lo que le ha permitido crecer de manera constante e ir sumando nuevas áreas de negocio durante este recorrido de más de medio siglo.

«La empresa fue fundada con el concepto de poder abastecer a los productores hortícolas en ese momento de todos los productos necesarios, por ejemplo: ferretería agrícola, semillas hortícolas, fertilizantes, agroquímicos, etc.», recuerda Cecilia Macció, directora de Pedro Macció y Cía., y parte de la tercera generación de la familia en trabajar en la empresa.

Tras años de crecimiento, la importación de fertilizantes, que Pedro Macció y Cía incorporó en 1991, llevó a la empresa a dar el gran salto. Luego se sumaron otras áreas de negocio, como la importación de agroquímicos o la línea de genética de soja.

Involucrada en la empresa desde muy joven, Cecilia Macció ha visto la evolución y transformación de Pedro Macció y Cía, esa sólida trayectoria que se identifica con el trabajo en equipo, la mejora continua y el foco en brindarle los mejores productos y servicios a sus clientes.

¿Cuáles son tus principales recuerdos de aquella época en la que ibas al Mercado Modelo, donde trabajaban tus padres?
Mi principal recuerdo es que yo iba de niña todos los días a Macció del Mercado Modelo, ya que la camioneta me dejaba allí a la vuelta de mi escuela, y yo tenía un gran amigo, un señor muy mayor, recordado como «El alemán». Él me pelaba semillas de zapallo; a mí me encantaba conversar con él y pasar el rato. Estas experiencias me ayudaron a desarrollar un profundo vínculo con la empresa y el sector agrícola.

¿A qué edad comenzaste a trabajar en la empresa y cómo fue tu trayectoria dentro de ella?
Empecé muy joven, con 19 años y mi primera responsabilidad fue atender el teléfono y archivar facturas; en esa época manuales, obviamente, y en archivos en los que no era fácil encontrar lo que se estaba buscando. Eso es lo q menos me agradaba hacer, pero atender el mostrador y todo eso contribuye a formarte y conocer distintos lugares de la empresa. Luego ya empecé a hacer el seguimiento de los «deudores varios» y también el análisis de presupuesto de la empresa y, actualmente, en mi posición en la dirección, tengo la oportunidad de influir en la estrategia y el crecimiento de la empresa, lo cual es extremadamente satisfactorio.

¿Cuál fue el momento transformativo de la empresa que la puso en camino a lo que es hoy en día?
Sin dudas que en el transcurso de estos 57 años ocurrieron varios momentos de importancia. La empresa fue liderada luego de mi abuelo por la segunda generación familiar, con grandes líderes como lo fueron Luis y Walter Macció, así como también mi tío Carlos Inzetta. Luego de transitar grandes dificultades al principio, la empresa empezó a crecer, instalándose en la ciudad de Pando. Ya en el año 91, unos de los momentos más importantes de la empresa fue cuando construimos en Ruta 1 el primer depósito para fertilizantes. Con la incorporación a la empresa de quien es hoy el gerente general, Jorge Zunino, junto a grandes colaboradores que han ido formando lo que es la idiosincrasia y el equipo de recursos humanos de Macció, empezamos a crecer, sobre todo, en el mercado de fertilizantes, un mercado en el cual se requiere un gran conocimiento de la plaza y de los momentos de compra. No olvidemos que durante aquellos años, la situación financiera de los productores y de los distribuidores no estaba tan saneado como podría llegar a estarlo hoy, eran épocas de mucha inestabilidad financiera, con deudores incobrables.

Con el correr de los años llegó el «boom» de la agricultura. Nosotros acompañamos el crecimiento en el área agrícola, instalándonos con otra celdas de acopio en un punto estratégico para la entrega de fertilizantes en la ciudad de Nueva Palmira, y luego también incorporando una planta de silos para granos y una planta de semillas

¿Cuáles son las dimensiones del negocio de Pedro Macció y Cía. hoy en día?
La empresa Macció ha estado afortunadamente en continuo crecimiento desde hace ya varios años, se ha consolidado y destacado por ser una empresa familiar de origen 100% uruguayo, y nos hemos convertido en una de las principales importadoras de bienes privados del Uruguay. Gozamos de una saneada estructura financiera y con resultados positivos desde hace varios años, los cuáles nos han permitido el crecimiento, gracias a una continua reinversión en el negocio. Estas inversiones en infraestructura y tecnología han sido claves para mantener nuestra competitividad y para seguir ofreciendo un servicio de alta calidad.

Contamos con gran apoyo de la plaza financiera. El Banco Santander juega con nosotros un papel muy importante: nos hemos encontrado con un gran banco, pero sobre todo con las personas que lo han conformado. Tengo muy buenos recuerdos de mi padre Walter en reuniones y logros conseguidos con Jorge Jourdan, y luego con una gran relación de continuidad entre las partes, especialmente con Gustavo Trelles, a quien conocemos desde sus inicios.

¿Cuán valiosa ha sido la sociedad con Syngenta para el posicionamiento de la marca?
Muy valiosa. Hace 23 años que somos representantes exclusivos para Uruguay de esta marca en lo que respecta a protección de cultivos, pero la historia viene desde los inicios cuando eran Ciba Geiby, una de las principales empresas químicas de origen suizo. Esta alianza nos posiciona como empresas responsables, que están a la vanguardia en la investigación y desarrollo de moléculas para acercar al productor productos de excelente calidad 

¿Qué elementos han permitido a Macció mantenerse al tope del rubro, pese al aumento de la competencia?
La existencia de la competencia es vital para que nos exijamos diariamente en enfocarnos en nuestra meta, recordar nuestras raíces y mantener una relación cercana con nuestros clientes. En Macció nos proponemos brindar un servicio excepcional y una consigna bien importante es disponer de insumos durante todo el año. La capacidad de adaptación que hemos tenido y la incorporación de tecnologías nos han permitido mantenernos a la vanguardia. En Macció, en ambas plantas, se carga sin agenda previa, lo cual es muy valorado por nuestros clientes.

Dentro de la tecnología nueva por la que han apostado, por ejemplo en materia de fertilizantes, ¿cuál es la que más destacaría?
Destacaría el uso de inhibidores de nitrógeno y fósforo, los cuales aumentan la eficiencia del uso de los nutrientes y reducen el impacto ambiental. Además, hemos incorporado varias fórmulas con micronutrientes, como zinc y boro, apuntando a elevar, junto al manejo agronómico adecuado, los rendimientos potenciales de los cultivos. Contamos con logística propia para la entrega de fertilizantes líquidos con nitrógeno y azufre.

¿Cómo se asiste al productor a invertir inteligentemente?
Insistimos en calcular siempre el costo por unidad, por ejemplo, en lo que refiere a nutrientes. Hemos incorporado al mercado uruguayo fuentes de grano único que, si bien a simple vista pueden parecer más caras, pueden terminar siendo una gran inversión. El productor está cada vez más informado, pero también es tradicional en cuanto a la incorporación de nutrientes y a veces no saca esas cuentas. Es importante dar una atención personalizada de acuerdo a las necesidades de cada productor. Hoy existen otras formas de ahorro inteligente, en cuanto a agricultura por ambiente y, además, en el trabajo pensado y ordenado de manejo e inversión

Has valorado al sector como uno «más profesional, más pujante» y «más consolidado y eficiente». ¿Qué elementos son clave para mantener estas características positivas?
La profesionalización del sector es crucial. La comunicación clara con nuestros clientes y el intercambio de información valiosa son fundamentales para mejorar el negocio. Aunque no podemos prever todas las tendencias, contamos con la experiencia necesaria para adaptarnos y mantener relaciones comerciales sólidas. Los productores y distribuidores han desarrollado estructuras más consolidadas y eficientes, lo que contribuye a un sector más robusto y competitivo 

¿Qué podés destacar de lo que la empresa hace a nivel social?
Hace ya muchos años que la empresa colabora desde varias áreas con la escuela pública a nivel nacional. Nos enorgullece enterarnos, a través de cartas de las directoras de las escuelas, en qué han utilizado los recursos y nos reconforta contribuir con nuestro grano de arena. Además, apoyamos a liceos privados y a instituciones de salud. Estos esfuerzos reflejan nuestro compromiso con la comunidad y nuestra responsabilidad social

¿Cómo imaginas los próximos años de Pedro Macció y Cía.?
Es un desafío muy importante para la familia Macció la continuidad del negocio y fortalecer nuestro rol como líderes en el sector agrícola. Queremos transmitir los valores que hemos recibido de generación en generación. Hoy trabajan en la empresa, por elección propia, cuatro primos que son de la cuarta generación, y digo por elección, porque cada uno es responsable de elegir y diagramar su futuro en cualquier profesión. Los que elegimos este camino de la empresa, lo hacemos pensando en crecer en el servicio al cliente, en continuar siendo una empresa confiable, con permanencia en el tiempo y que brinda productos innovadores.